Cooperativa Kaiku. Desde 1953, un proyecto de futuro
ORIGEN DE LAS COOPERATIVAS Y CENTRALES LECHERAS
El año 1952, con el Decreto de 18 de abril sobre creación de Centrales Lecheras en Municipios de más de 25.000 habitantes, marca el futuro del sector ganadero de leche y la industria láctea. Objetivos:
- Actuar como filtros sanitarios para la centralización y selección de toda la leche destinada al consumo directo local.
- Asegurar durante todas las épocas del año el abastecimiento.
- Garantizar al consumidor un suministro normal con leche pura e inocua con garantías de higiene.
- Regular los precios, mejorar todos los factores que afectan a la calidad de la leche y estimular su producción y consumo.
Constitución de las cooperativas de productores de leche
El 7 de febrero de 1953 en Pamplona, el 1 de marzo de 1953 en Bilbao y el 29 de Diciembre de 1954 en San Sebastián, con el objeto de la venta en común de la leche se constituyen de forma preliminar: “Cooperativa Navarra de Productores de Leche”, “Cooperativa de Productores de Leche de Vizcaya” y “Cooperativa Provincial de Productores de Leche de Guipúzcoa”.
Creación de las Centrales Lecheras
1953
1954
1955
Una Central en Vitoria y en San Sebastián dos centrales: “Sociedad de Estudios de Industrias Lácteas Guipuzcoanas” y “Cooperativa Provincial de Productores de Leche de Guipúzcoa”; posteriormente se unificarán bajo una única, “Centrales Lecheras Reunidas de Gipuzkoa, SA”.
Consumo de leche y desarrollo ganadero
La importancia de la leche como producto alimenticio de primera necesidad se pone de manifiesto por aquella época con la promoción por parte de UNICEF de una industria que permitiera elaborar productos lácteos para la infancia y sustituyera las importaciones y donaciones de leche en polvo americana. Así, en 1957 se adjudican las instalaciones para la fabricación de leche en polvo a Gurelesa e Inlena.
Las Cooperativas hacen efectivo a los ganaderos el devengo de sus aportaciones de leche, conceden los créditos de auxilio para la mejora y compra del ganado y facilitan los piensos en las mejores condiciones para obtener una producción económica, servicios estos que son inherentes al carácter social de la cooperativa y su vinculación con el ganadero.
Además, el cobro de la venta de la leche supone por primera vez un ingreso fijo, especialmente valorado por los ganaderos: “La leche era la nómina mensual, como un jornal a fin de mes”.
En los años 80, el esfuerzo conjunto de las cooperativas e instituciones hicieron posible la instalación de tanques de frío que incrementarían notablemente la calidad de la leche.
No sería hasta 1985 cuando toda la leche esté refrigerada en origen y casi todos hayan saneado el ganado. Todo ello viene acompañado de los esfuerzos realizados en los años 80 en las mejoras de las cuadras, los accesos a los caseríos y la renovación de los mismos junto con las traídas de electricidad y agua potable.
INTEGRACIÓN Y CRECIMIENTO EN EL NUEVO MARCO EUROPEO
La relación y entendimiento entre las cooperativas se fortalecería con el tiempo. En 1969 se propone la creación de una sociedad que integre las tres plantas lecheras. La marca comercial se unificaría en Kaiku.
1970
1972
1975
La incorporación a la Comunidad Económica Europea
En 1986 la incorporación a la CEE y la aplicación de las políticas comunitarias tiene consecuencias inmediatas en el sector: la implantación del Régimen de Cuotas, la eliminación del precio mínimo de compra al ganadero, la desaparición de las concesiones administrativas para la venta de la leche higienizada.
Además, las fronteras se abren a la entrada de leche excedentaria producida y envasada en Europa.
En 1988 se realizan gestiones entre las centrales lecheras de Gurelesa, Copeleche, Beyena y Celasa, así como con las administraciones de Euskadi y Navarra, al objeto de ver la posibilidad de llegar a una fusión de las industrias. Se pretende la racionalización, la coordinación, la simplificación de los diferentes aspectos que intervienen en el proceso productivo de la recogida, industrialización y venta de leche.
El año 1989 es el primer ejercicio de gestión conjunta, momento en que la marca Kaiku se establece como insignia del grupo.
1990 se firmó con la cooperativa LANA de Mondragón el acuerdo de integración de la división de leche líquida de vaca, ofreciendo al mismo tiempo a los socios de la misma que lo deseasen la opción de incorporarse a Gurelesa.
1992 se produce la fusión por absorción de GURELESA, CELASA Y CLEDEL por IPARLAT, antigua INLENA.
En 1995 se inaugura en Urnieta la planta con tecnología más avanzada de Europa. En ella se concentraría toda la producción de leche en brik (UHT).
En 1995 Iparlat compra a Tabacalera las plantas que Lactaria Española tiene en Renedo de Piélagos, Bilbao –Central Lechera Vizcaína (ONA)- y Logroño. Años más tarde, en el proceso de reconversión industrial se cierran las plantas de Bilbao y Logroño; con anterioridad se habían cerrado Celasa y Cledel.
La estructura societaria de Iparlat, constituida por las cooperativas de ganaderos Kaiku, Agrocantabria y Lleters de Catalunya; las entidades financieras Caja Rural de Navarra, Iparkutxa y Caja Cantabria; y las entidades de desarrollo Socade y Sodercan.
La integración de las cooperativas de ganaderos
El primer paso en esta dirección se dio con la constitución en 1999 de la Cooperativa de 2º grado Kaiku entre Gurelesa y Copeleche.
En junio de 2009 las asambleas extraordinarias celebradas por las cooperativas aprueban la fusión por absorción en Kaiku Cooperativa.
El 30 de Diciembre de 2009, se celebra en Pamplona la primera asamblea extraordinaria de Kaiku Cooperativa de primer grado.

